Otro punto de vista

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Este año, Irán se encuentra en la segunda posición, lugar que hasta ahora había sido ocupado con regularidad por Arabia Saudí. El número total de puntos se redujo ligeramente debido a la ausencia de los informes de los cristianos asesinados por su fe durante la formación de la anterior lista. La ola de arrestos de cristianos que se inició el año pasado continuó aún más fuerte durante el año 2009, con al menos 85 cristianos arrestados. Se sospecha que las detenciones son el modo empleado por el gobierno iraní para distraer la atención de los problemas internos (como la crisis interna después de la reelección del presidente Mahmud Ahmadineyad en junio) y para mostrar que están al mando. La mayoría de los detenidos fueron maltratados en la cárcel. Y aunque la muchos de ellos han sido liberados, quedan casos judiciales pendientes, lo que implica que los creyentes pueden ser condenados en cualquier momento. A esto se suma el hecho de que son muchos los cristianos que, tras su liberación, están siendo vigilados y amenazados. Todos estos arrestos que se suceden de forma continuada, unidos al cierre de algunas iglesias por parte del gobierno iraní durante el año 2009, principalmente debido a la presencia de muchos recién convertidos musulmanes en las reuniones, están causando un gran temor en los cristianos [1].  

El Islam es la religión oficial en Irán, y todas las leyes y reglamentos deben ser compatibles con la interpretación oficial de la Sharia (ley islámica estricta). Aunque los cristianos armenios y asirios son una minoría religiosa reconocida oficialmente, con lo que ello implica (libertad religiosa), también ellos han sufrido encarcelamiento, abuso físico, acoso y discriminación a causa de su fe. A las iglesias armenia y asiria se les permite enseñar a compatriotas en su propio idioma, pero tienen  prohibido evangelizar a las personas de origen musulmán (habla persa). En las interpretaciones judiciales de la Sharia, cualquier musulmán que abandona el Islam para abrazar otra religión se enfrenta a la pena de muerte [2].

Muchas reuniones de las iglesias cristianas están siendo monitoreadas por la policía secreta. Los creyentes que están activos en las iglesias o el movimiento de la célula del grupo están siendo interrogados, detenidos, golpeados y encarcelados. Por su parte, los creyentes individuales están siendo oprimidos por la sociedad bajo la presión de las autoridades [3].

Desde el principio, el régimen fundamentalista quiso ocultar la represión. Para ello, trató de obligar al Consejo de Pastores Protestantes a firmar un documento preparado por las autoridades políticas e islámicas en el que se afirmaba que la Iglesia Cristiana en Irán gozaba de libertad religiosa. Esto no fue aceptado por los dirigentes cristianos ya que distaba mucho de su verdadera misión: eran responsables de informar acerca de las violaciones de los derechos de los cristianos iraníes. Estos informes fueron publicados en todo mundo.

Su negativa no fue del agrado de los líderes religiosos del país, lo que llevó al encarcelamiento de algunos de los miembros del Consejo de Pastores Protestantes, como fue el caso de su presidente [4], que acabaría siendo asesinado [5].

 

[1] 50 51  World Watch List, January 2010 – Focus of the Top Ten, pp. 4-5

52 Anneke Companjen – Dolor oculto, gozo permanente. pp 136-137

53 Anneke Companjen – Dolor oculto, gozo permanente. pp 139